Aunque pocas son las veces que la literatura reconocida le ha dado voz a las mujeres, esto no significa que las escritoras hayan estado ausentes en la historia literaria nacional. De hecho, muchas de ellas son mujeres que se adelantaron a su época a través de sus obras y que decidimos olvidar porque consideramos atrevido que una mujer dijera lo que pensara.
Este es el caso de Marvel Moreno, una escritora barranquillera cuyo nombre ha sonado bastante en las últimas semanas, pero que debió sonar desde hace años.
Foto: Revista Arcadia
Nacida en la ciudad de Barranquilla, hija de una familia poderosa de la ciudad, a lo largo de su corta carrera literaria se dedicó a hablar críticamente de su posición privilegiada. En los años 40 y 50, la ciudad de Barranquilla, y en general todas las grandes ciudades del país, se convirtieron en nichos culturales en donde abundaba la pretensión y el machismo. Solo aquellos que crecieron en familias de la alta sociedad hacían parte de tertulias literarias y filosóficas y por supuesto, pocas eran las mujeres que tenían la posibilidad de sentarse, de igual a igual, a discutir con hombres sobre las diatribas de la cultura.
Foto: Revista Arcadia
La historia de Marvel Moreno parece sacada de una novela. Una joven que, luego de ser coronada como Reina del Carnaval de Barranquilla, huye de su país a Europa, renunciado a los privilegios de ser la hija de una familia poderosa y acaudalada, para refugiarse en la escritura y conservar intacto el recuerdo joven que tenía de Colombia.
Y eso hizo. Sus relatos son el reflejo de esa sociedad clasista y machista que marcó la Barranquilla de los años 40, pero que a su vez podía ser el espejo de cualquier ciudad Latinoamericana. Aunque fueron varios los cuentos que publicó, su única novela que vio la luz fue ‘En diciembre llegaban las brisas’ una historia en donde sus tres protagonistas sufren las condiciones de lo que significa ser mujer en un mundo que todo lo prohíbe y lo reprime. Fue su narrativa lo que la calificó como una de las grandes feministas colombianas, aunque la historia haya decidido olvidarla.
Foto: Vanessa Rosales Blog
En la pasada Feria internacional del Libro de Barranquilla, la primera que se celebró en esta ciudad, uno de los conversatorios estuvo encaminado a una discusión sobre el legado de Marvel Moreno dentro de la literatura colombiana. Lejos de ser eso, la charla entre Plinio Apuleyo Mendoza, ex esposo de la escritora y Mauricio Vargas, periodista, se convirtió en un discurso de dos hombres sobre la vida personal de Marvel, su matrimonio y su belleza física. Por ningún lado asomaron las virtudes literarias de la barranquillera, su obra ni la herencia literaria que dejó.
Resulta incomprensible que una mujer cuya obra literaria se destaca por hacer visible las indolencias del patriarcado, siga siendo hoy en día vilipendiada por aquellos que se consideran dueños de su obra. En 1994 Marvel escribió una novela llamada ‘El tiempo de las Amazonas’, antes de morir pidió que la novela fuera publicada. Sin emabrgo, los derechos de ella pasaron a sus dos hijas que, aconsejadas por su padre Plinio Apuleyo Mendoza, han mantenido esta obra escondida durante 24 años, bajo el argumento de que es una novela con baja calidad editorial.
Sin embargo, en esa misma feria del libro de barranquilla, el colectivo feminista 'Amazonas', ejerció presión a través de un performance en medio de la conversación sobre Marvel Moreno y lograron, hasta este momento, que el manuscrito sea puesto en manos de la editorial Penguin Random House quien, luego de leerla y estudiarla, tendrá la última palabra sobre el valor editorial de la novela y decidirá si se publica o no.
Ahora, más que nunca, se hace indispensable poder visibilizar la obra de la escritora barranquillera, para que su legado no siga quedando en manos del patriarcado que durante años la atormentó.