Foto: Facebook oficial Liniker e os Caramelows.
Hablamos de Liniker, la cantante brasileña que combina las letras irreverentes de sus canciones con soul y ritmos tropicales en busca de una reivindicación política para la comunidad LGBT en un mundo que, al parecer, no termina de entender que la diversidad sexual es otra forma de belleza. Hablamos de Liniker, la artista trans, la mujer negra.
Mide casi unos 180 centímetros, sus cavidades óseas son anchas y el volumen de su cuerpo deja entrever una apariencia delgada. Tiene una sonrisa que esconde un poco el dolor que ha vivido y una banda que la acompaña siempre después de su nombre: Liniker e os Caramelows. Con ellos y gracias al contenido de la música que componen, sus historias conjuntas iniciaron sin discos, con tres canciones estrenadas en internet y con una gira a los dos meses de haberlas publicadas.
Y es que al ser ella la cara, su estética andrógina y sus vestidos de lentejuelas hicieron una fractura en el muro de prejuicios e imaginarios del Brasil actual: “Vivimos en un país muy difícil. Empezamos a reconocernos y a querer salir porque no teníamos representatividad. Queríamos entrar en los espacios en los que hasta ese momento no teníamos acceso —le contó la compositora al diario El País de España a propósito de la llegada del “ultraderechista Jair Bolsonaro a la presidencia, y que ha supuesto una decepción para la banda, defensora de todas las causas que el mandatario desprecia”—. Con Bolsonaro en el poder, tenemos miedo, estamos expuestos”.
Por eso reunimos cinco canciones que debes escuchar para comprender su universo musical:
Zero
Nos muerde, ¿no?
Diente, labio, tu forma de ver
Recuerdo el beso en tu cuello
Intimidade
¿Qué se siente tomar un poco de tiempo para acercarse a mí?
Calmô
En la vieja casa había incluso montañas
Y en las calles de la ciudad había gente
Caminando junta
Tua
Pensé en una canción, cariño
Que hablara de amor, así que vine aquí
De Ontem
Sólo componiendo versos y más versos para cantar a tus oídos
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