Columna de opinión
A propósito de esta celebración de Halloween, vuelvo con mi Árbol de Letras a contarles de monstruos, horripilantes, dulces, enormes, pequeños y coloridos; los monstruos de Nicolás Buenaventura con quien me senté a hablar en una entrevista que resultó más como él contandome historias y yo perdida en medio de sus cuentos.
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Hay una cosa de los libros a la que le tengo miedo y se llama la introspección. Es una cosa que creo que me pasa con la mayoría y es que al final, las historias se vuelven un reflejo mismo de mi vida, de mis emociones y de mis pensamientos. El asunto es que con los años me pasa cada vez más, y son casi todos los libros en los que me encuentro.
Hace algunos meses Editorial Panamericana, en cabeza de mi linda Camille Melo me envío un ejemplar de un librito que a simple vista me pareció encantador. 'Un montón de monstruos' es lo que yo siempre quiero, dibujos, colores e historias simples sin pretenciones; pero además de todo, este libro tiene stickers, sí, ¡Stickers!. Así que mi primer encuentro con este libro fue un encuentro de juego porque a eso invitan nicolás Buenaventura, el autor, Luisa María Arango, la ilustradora y todos los monstruos que habitan estas páginas.
Pero además, resultó que leer 'Un montón de monstruos' pasó de ser solo un juego a convertirse en una lectura para mirarme, para pensar de manera juiciosa, en los monstruos que yo misma pinto, en los monstruos que me dibujo y que a veces me he auto impuesto. Por supuesto que no a todos les pasa, es solo que 'Un montón de monstruos' aterrizó en mi biblioteca en un momento en el que se hacía necesario detenerme, pensar y abrazar a mis propios monstruos.
Lo curioso es que justo después de ese, a mi escritorio llegó 'Mi monstruo y yo' de Valentina Toro: los libros no hablan, claro que sí.
Espero que disfruten la entrevisa y que tengan ¡Feliz lectura!