Estuvimos conversando con dos productores musicales, Diego Abril y Sergio Suzarte, quienes nos contaron cómo ha sido esa transición del mundo análogo al digital, cuáles son las nuevas herramientas y cómo la tecnología está abriendo las puertas a esta gran industria.
“Ya se puede hacer un artista desde casa, con buenas herramientas algo de plugins y librerías, se puede componer un disco sin tener un estudio profesional” señaló Diego Abril.
Un cambio en el modelo de negocio de la música
En años anteriores los artistas debían vender su música puerta a puerta con ayuda de las disqueras, no obstante, las empresas que movían estas marcas descubrieron que se podían ir a la quiebra, pues con la llegada de las nuevas tecnologías las personas ya no pagan solo por música, sino por un muy buen show.
“Antes nos basábamos en componer con guitarra, bajo, cuerdas o lo que tuviéramos a la mano, ahora con la tecnología tenemos una cantidad de herramientas casi que infinitas” aseguró Diego Abril.
La llegada de Youtube y Vevo opacaron a MTV y VH1
Los canales como MTV, VH1, en los que muchos de los artistas dieron a conocer su música han ido perdiendo fuerza, las nuevas generaciones llegaron con el chip digital y se mueven en un mundo tecnológico en el que todo viene incluido en un dispositivo.
A este movimiento se unieron las plataformas audiovisuales youtube y Vevo, dos herramientas importantes para los músicos, pero en el constante cambio de las tecnologías se requiere innovación y exigencia. Gracias a Internet la industria musical se ha globalizado.
“El video tiene menos influencia sobre la gente, las personas tienen demasiada oferta, hay que crear un video que brinde una experiencia algo distinto al videoclip pues la gente hoy consume todo en Spotify” añadió Abril.
Plataformas de streaming ¿qué tan efectivas son?
El streaming más que monetizar ayuda a posicionar, cada vez es más difícil que las personas vean un video completo cuando la música la podemos descargar diariamente a través de plataformas como Spotify, Napster, Deezer o pagar por un concierto.
“No funciona solo el streaming, hay que bombardear desde otras plataformas, por ejemplo, radio, redes sociales o un en vivo, pero el streaming solo no anda” opina Abril.
Por su parte Sergio agregó “Existen también empresas distintas a las casas disqueras que venden paquetes a los músicos, se encargan de manejar la canción, direccionarla, saber en qué canal funciona mejor, vender y manejar redes sociales, así el artista puede dedicarse únicamente a la música”.
La piratería en la era digital.
Uno de los problemas que se vivía a diario en la industria musical, era la conocida “piratería” vender los cds a un precio más económico en lugares no autorizados. A mediados del 2000 esta práctica era muy rentable se hacía más popular el artista, abría las puertas para que algunos compraran el cd original y los que no, al menos lo conocieran.
Con la llegada del mundo digital esta tendencia quedó en olvido, pues aparecieron plataformas como Ares o Napster que permitían llevar la música en un computador o celular.
“La piratería es para papás, chicos de 16 años no saben lo que es comprar un cd, ellos nacieron cuando la música era gratis.” aseguró Abril.
"El negocio es que le llegue a más gente, la piratería tiene un doble sentido, impulsar al artista y darse cuenta que el negocio de la venta de la música lo puede hacer cualquier persona”. añadió Suzarte.
Algunas aplicaciones para profesionalizar un artista
“Para composición y producción garaje band, Apple les dio la herramienta más poderosa a los músicos independientes y si es para promoción, debe ser una persona experta en Facebook, youtube, Deezer, Spotify, Instagram y ágil en la creación de contenidos” afirma Diego Abril.
“El Internet es la gran herramienta que tienen los músicos, aplicaciones como Guitar Pro para aprender la técnica o amplitube para tener varios sonidos y conectarlos a una computadora.” señaló Sergio Suzarte.
No sabemos a ciencia cierta lo que nos depare el futuro de la tecnología en la industria musical, tal vez más adelante podamos teletransportarnos y asistir a conciertos en todo el mundo o quizás existan nuevas plataformas que demanden una creatividad mayor para impactar y generar nuevas audiencias digitales.
Por lo pronto estas son algunas pautas que se deben tener en cuenta para desarrollar la carrera de un músico. ¿Qué otras herramientas aportarían a este artículo?
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