Imagen: tomada de Pixabay.com (CC0).
Para nadie es un secreto que para la preservación de la especie humana y el resto de seres vivos que habitan la tierra, se es necesario el cuidado del agua y sus fuentes de nacimiento natural. Sin embargo, dicho recurso en estos tiempos se encuentra en una crisis extrema, ya que la población a nivel mundial ha tenido un crecimiento exponencial, al mismo tiempo que las empresas y las industrias que no favorecen su cuidado, empeoran los niveles de contaminación por medio de diferentes tipos de materiales.
Justamente el plástico hace parte de este tipo de contaminantes que está empeorando la situación del medio ambiente, ya que alrededor de 10.000 millones de residuos de este material terminan en el mar, siendo esto uno de los mayores contaminantes a nivel mundial debido a su tiempo de descomposición.
Se estima que al día de hoy se han producido 8.300 millones de toneladas de plástico virgen, lo que quiere decir que a la fecha se podría llenar todo un país como lo es Argentina, con todos los residuos de plástico que se encuentran en el mundo explicó Greyer a Jonathan Amos, corresponsal de Ciencia de la BBC.
Fuente: foto tomada de BBC y el tiempo de descomposición de ciertos materiales.
Lo ideal para mitigar esta grave afectación, sería por medio de leyes que regulen la producción y distribución de este insumo, adicionalmente que se empiecen a generar estrategias acertadas para la recolección y reutilización nuevamente del plástico, cosa que este no llegue a los ríos y a los mares, de este modo se generaría empleo y disminuiría en un gran porcentaje la contaminación que en ellos se maneja.
Actualmente algunos empresarios y micro empresarios, ya se están dando cuenta de que, por medio de la utilización de materiales sostenibles, pueden generar un impacto positivo y sembrar su grano de arena respecto a esta problemática.
Este es el caso de BohíoPlaya, una marca de ropa hawaiana 100% reciclada, fundada por dos hermanos paisas y emprendedores de la ciudad de Medellín, que desde hace 6 años aproximadamente decidieron cambiar su método de fabricación, por prendas amigables con el medio ambiente puesto que, de no ser así, seguirían siendo un factor contaminante, yendo en contra de su amor y gusto hacia la magia de la playa, el caribe, y la música del Joe Arroyo, que sirvió como inspiración de estos dos jóvenes.
Así que, con esta nueva iniciativa decidieron "crear las camisas mas sabrosas de la historia", así lo manifiesta Daniel, quien es una de las cabezas de este proyecto, es periodista y se encarga de toda la parte creativa, de publicidad y de mercadeo, a diferencia de su hermano que es administrador de empresas y hace que todo funcione en orden.
Foto: Hermanos BohioPlaya, tomada de @bohioplaya
En una entrevista con Daniel, nos cuenta que crearon la colección “Salvando Mares”, trabajando con una tela especial hecha de botellas de plástico extraídas del mar, y algodón reciclado. Para tener una idea mas exacta del beneficio por prenda, hay que saber que para la elaboración de una camisa se utilizan 5 botellas, para una pantaloneta de playa 4, y para un tapabocas 1 botella.
Por otro lado, y a diferencia de la mayoría de marcas de ropa que como bien se sabe, la industria de la moda es una de las mas contaminantes en todo sentido a nivel mundial, llegan a utilizar hasta 7.500 litros de agua para la elaboración de una camisa, con materiales comunes y corrientes. BohioPlaya en sus procesos utilizan 0%, ya que la producción se lleva a cabo con el algodón y con la tela que se mencionaba con anterioridad, haciendo que esta ya venga lista para su confección y no haya la necesidad de desperdiciar tanta cantidad de este líquido tan valioso lavando las telas.
En ese momento empezaron a investigar, sobre cómo podían hacer para contribuir con un granito de arena por medio de su empresa, así mismo asistieron y siguen yendo a diferentes ferias textiles donde se encuentran ideas novedosas de todo tipo. Fue así como descubrieron estos insumos, al igual que nuevas tintas a base de agua que no contaminan ni llegan a los mares, de este modo es que han evolucionado su marca por completo y en la cual siguen trabajando arduamente para ser 100% sostenibles.
No solamente pensaron en el cambio que querían lograr a nivel ambiental, sino que también decidieron darle valor a la mano de obra de abuelitas y madres cabeza de hogar, que, por su edad ya no consiguen trabajo en Colombia, ya que tristemente para muchas empresas pesa más la edad, que el conocimiento y la sabiduría que estas mujeres pueden brindar al crecimiento económico de un país.
La primera abuelita con la que empezaron a trabajar fue doña Beatriz, cuando apenas Daniel se encontraba en la universidad, con miles de ideas en su cabeza. Allí tenía varias compañeras que estudiaban Diseño y Confección de Moda. Un día les preguntó que si no conocían a una mujer que confeccionara prendas de vestir, fue allí donde ellas le comentaron que tenían a una señora que les hacía sus trabajos de la universidad. Él se puso en contacto con ella y hasta el día de hoy trabaja con BohioPlaya, desde la comodidad de su casa y con un excelente salario como ella se lo merece y amando lo que hace, ya que lo sigue haciendo por gusto y no por necesidad.
Foto: Doña Betriz abuelita BohioPlaya, tomada de @bohioplaya
Aparte de ella subcontrataron otro pequeño taller, el de doña Angela, una madre cabeza de familia, quien trabaja con su hermana y otras amigas de su barrio, quienes se encuentran en las mismas condiciones, en total son aproximadamente 6 costureras, quienes hacen parte de este bello proyecto, y quienes se encuentran sumamente agradecidas por darle valor a su trabajo y sus años de experiencia. Por otro lado, no solamente trabajan con abuelitas y mujeres cabeza de hogar, sino que sus domiciliarios son personas que cuentan con algún tipo de discapacidad, pero no incapacidad, haciendo de Bohío una empresa inclusiva y comprometida con el medio ambiente, su mensaje para los futuros emprendedores y empresas es:
“Que el ser sostenible no es un valor agregado sino es una necesidad, ya se ha explotado el planeta en un 100%, y no es viable que se siga impactando de forma negativa sino hacerlo de forma positiva”.
Así lo indica Daniel y su marca de las camisas más sabrosas.
Es por ello que la carrea contra el medio ambiente ya empezó y aún estamos a tiempo de generar un cambio positivo como lo hacen estos dos jóvenes, con el fin de preservar los ríos y los mares, que son quienes más se ven afectados. Para tener una idea un poco más clara de lo que esto representa, la Clínica Jurídica de Medio Ambiente y Salud Pública (MASP) de la Universidad de los Andes y Greenpeace Colombia, desarrollaron un informe donde se evidencia que, entre los 20 ríos más contaminados del planeta por el plástico, se encuentra el Amazonas con el puesto número siete, y Magdalena, siendo la principal arteria fluvial en el puesto número quince.
Richard Thompson, profesor de Biología Marina en la Universidad de Plymouth, en Inglaterra, explicó que todavía no se cuenta con la tecnología suficiente para reciclar todo el plástico que se produce a nivel mundial, pero que una ventaja, es que al separarse y hacer el proceso de reciclaje podría seguir teniendo una vida útil; por ejemplo: una botella puede recalcarse hasta 20 veces y esta no va a perder las propiedades que la componen.
Fuente: foto tomada de BBC producción de plásticos. .
Al día de hoy el 79% de los plásticos desechados, ha terminado en un río o vertedero al mar, solamente el 9% de todo el plástico que se ha producido, ha sido reciclado a nivel mundial, el 12% adicional incinerado. Adicionalmente el 80% de todos los residuos que se encuentran en el mar, provienen de las costas y tierra firme, mientras que el 20% restante es de actividad marítima. Por otro lado, se ha evidenciado que a 10.000 metros de profundidad en el océano también se han encontrado estos residuos, se estima que los plásticos que llegan a las costas, son solamente el 15% de lo que realmente se encuentra en las profundidades.
Este es uno de los factores que más afecta a las diferentes especies de animales que allí se encuentran, y las tortugas son una de las más afectadas, ya que confunden las bolsas con medusas y se las comen, generando una aflicción interna dentro de las mismas, ocasionando su muerte al igual que muchos otros animales que en el mar habitan, según Greenpeace.
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