Marcha por la paz en Colombia (2008) / Foto: AlCortés – Flickr (CC)
Seis generaciones de colombianos han crecido en medio de un conflicto y han tenido que sufrir las consecuencias de las miles de acciones armadas de los grupos insurgentes y narcotraficantes, y de las batallas que el Estado ha librado contra ellos. ¿Cuál es el origen de este conflicto?
Algunos aseguran que fueron los desajustes sociales, políticos, culturales y económicos que ha vivido Colombia desde su independencia en el siglo XVIII. Otros creen que fue la Guerra de los Mil Días a finales del siglo XIX. También están quienes dicen que fue el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril de 1948 y los que creen que fue la lucha bipartidista de los años 50 y principios de los 60.
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Grupo de las Farc durante el proceso de paz del Caguán / Foto: DEA (Dominio público)
Lo cierto es que a mediados de los 50 surgieron diversos movimientos guerrilleros, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Ejército Popular de Liberación (EPL) y el M-19, y en los 80 y 90 el narcotráfico se tomó el país. La violencia y el terror eran pan de todos los días en el país.
[También puede interesarte] El conflicto armado colombiano ilustrado en #CronografíaEste conflicto nunca se ha ajustado a una definición de guerra o revolución, pero ha dejado millones de desplazados, huérfanos, heridos, violaciones de derechos humanos, masacres, debilitamiento de las instituciones, deterioro de la infraestructura y un claro agotamiento de la sociedad civil. El que siempre pierde es el pueblo.
Por eso, cada vez se hizo más necesario buscar un acuerdo que permitiera solucionar parte de este conflicto y así darle un nuevo aire al país. Entonces, diferentes gobiernos intentaron entablar conversaciones con los representantes de los grupos guerrilleros, bajo la etiqueta ‘Diálogos de Paz’. Infortunadamente todos fracasaron y el conflicto persistió.
Firma de los acuerdos de paz entre el Gobierno colombiano y las Farc / Foto: Presidencia El Salvador (Dominio público)
Una nueva oportunidad se presentó en el 2012. Ese año el Gobierno y las Farc establecieron una mesa de diálogo en La Habana (Cuba), de la cual, en 2016, salieron unos acuerdos que fueron presentados a la sociedad civil para que el grupo armado empezara su desmovilización.
Es claro: cada muerto es una ausencia lamentable y ningún conflicto vale la pena. Por eso es tan importante para el país y sus habitantes el desmonte de las Farc. Estamos a unos pocos pasos de poder generar los cambios que pueden construir un futuro, sin olvidar el pasado. No en vano entre el perdón, la esperanza y la memoria, hay mucho por hacer. Y mucho es una vida, no una muerte en vida.
Cronografía a las 8 pm #EnLaTV de Canal Trece