Fotos por Anderson Labrador, Canal Trece
Desde hace dos y tres semanas, buena parte de la población del mundo está en una cuarentena para frenar el avance del COVID-19, razón por la que muchas personas están en su casa y su conexión con el mundo es, sobre todo, virtual. Por ejemplo, así se vio la Carrera Séptima de Bogotá durante los primeros días de la cuarentena decretada por el Gobierno Nacional.
La Carrera Séptima de Bogotá en los primeros días de la cuarentena nacional.
Con esta conexión constante a Internet y más tiempo libre, la cantidad de listas sobre películas, series, documentales y programas relacionados con situaciones parecidas, también ha aumentado. Solo hace falta escribir en Google “películas de pandemia” para darse cuenta: la búsqueda de películas que traten sobre el fin del mundo, los brotes, las pandemias y el apocalipsis se ha incrementado casi tan exponencialmente como la curva de contagio del COVID-19.
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“Cuando el cine se anticipa: 10 películas sobre virus y epidemias que amenazan a la humanidad”, “Películas que predijeron la pandemia del coronavirus para ver esta cuarentena”; “Coronavirus: 10 películas sobre pandemias y otros ‘apocalipsis’”, son algunos de los primeros resultados que arroja el buscador.
Incluso, en Canal Trece, como sabemos que nos gusta el miedo, nos estamos preparando para traerle a nuestros televidentes, una serie de suspenso grabada en nuestras regiones, para complementar esa dosis de entretenimiento que todos están buscando, y qué mejor que con la televisión pública. Muy pronto, daremos noticias de este estreno.
Este consumo elevado de series, películas, documentales y programas en este momento tan particular, también lo corroboran las tendencias de Google, donde las búsquedas relacionadas con “películas de virus” se han disparado en Colombia durante el último mes. La tendencia también se repite en Estados Unidos.
El aumento en Estados Unidos es similar en marzo:
Con este panorama, quisimos saber ¿cuál es la razón por la que, en medio de un escenario de tanta incertidumbre como el actual, a las personas nos gusta ver este tipo de documentales y películas? Para salir de esta duda, le preguntamos a Luisa Cadena, psicóloga clínica y Máster UCL en Investigación en Psicología y Políticas Públicas de la Universidad de Oxford.
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"Esto es un fenómeno psicológico absolutamente normal. Es una forma humana de afrontar situaciones de crisis o difícilmente explicables con la razón. Y esta es una manera que encontramos los seres humanos para poder procesar nuestras emociones (que pueden fluctuar desde la ansiedad, la duda, la incertidumbre y la tristeza)", explica Cadena.
De acuerdo con la psicóloga, esto también es lo que suele pasar durante, por ejemplo, un duelo con las canciones tristes. "Uno escucha no solamente canciones tristes, también las de despecho. Porque es la forma que encuentras de sacar lo que tienes atravezado adentro".
Vista del Teatro Jorge Eliécer Gaitán durante la cuarentena.
"Lo que está pasando es que los humanos, intuitivamente, están buscando darle sentido a lo que está pasando y una de las formas de dar sentido es proyectar afuera lo que no estoy pudiendo tramintar adentro. Entonces, ver una película en la que otros afuera de mi, en teoría les ha pasado lo mismo. Me ayuda a buscar esperanza en situaciones que pueden ser muy desesperanzadoras", apunta Cadena.
"De hecho, la cine-terapia ya es una corriente de psicología clínica que se mueve. Entonces, por ejemplo, para el estrés postraumático hay películas maravillosas que explican el estrés, por ejemplo con un protagonista que está pasando por esto. Como terapeuta, uno a veces usa el cine para que las personas se puedan ver reflejadas, para que puedan expresas algunas cosas".
Esto es lo que pasaba, recuerda, luego del ataque a las Torres Gemelas en septiembre de 2001. Entonces, era común que muchos niños norteamericanos jugaran a estrellar aviones. El problema ocurre, advierte Cadena, ocurre cuando las personas desbordan el consumo de estos productos y las emociones que generan, entonces, no son de tranquilidad y sentido, sino de angustia.
"Tretemos de utilizar este recurso en otras cosas que nos dé otro tipo de consumo cultural que nos llene de esperanza, que nos dé otra visión y conserve el principio de realidad", afirma. Esto quiere decir que, de todas formas, estas son películas de Hollywood y se desarrollan en dos horas, lo que significa que el mundo no va a evolucionar de la misma forma. "Mañana no te va a pasar nada, estas películas no pronostican ni adivinan el futuro y, sobre todo, el mundo es distinto y esta enfermedad también", explica.