Confieso que ver en mi adolescencia los ‘Teletubbies’ me fastidiaba sobremanera, lamentaba que fuera tan famoso un espacio que yo veía tan pendejo. Claro, en mi opinión de época de inconformismo, acné y cambios de humor porque el mundo no me entendía… Lee también: La oferta de contenidos para niños y jóvenes en nuestra televisión Ahora, ya con la madurez que llega con los años -no tantos me creo joven aún-, poder comprobar que en Colombia sí creen y le apuestan a esta audiencia y que no le tienen miedo a producir espacios para y por los niños, me motiva, me anima, me hace pensar qué bonito habría sido ver esos espacios cuando niña. Ahora se tiene un punto clave, entender que los padres también deben ser protagonistas de los contenidos infantiles. Pensando en eso se crean proyectos que enfocan las diferentes plataformas de divulgación, redes sociales, Twitter, Facebook, YouTube, etc., con información de interés para los papás, cuidadores y maestros de los niños. Sí se puede, sí vale la pena tener calidad para esta no pequeña audiencia y debería ser motivo de orgullo decir que la televisión pública en Colombia tiene espacios que brillan, son reconocidos y hasta referente para otros países. https://www.youtube.com/watch?v=3ptP-aIwg5E&list=PLGsF4QfCJgJmofiRlNCfpGuA7wL7WD6lj&index=10 Qué buena apuesta, por ejemplo, la de ‘La Lleva’, que logró sumergir a los niños en otras culturas, conocer y vivir las tradiciones no solo de su región, viajar, conocer su país, cumplir un sueño. Nos acercamos a una ilusión que no parece tan inalcanzable ahora, ¿qué tal si creamos un canal para los niños colombianos? Siempre se escucha, hasta en voz de políticos, que “los niños son el futuro”. Si lo tienen claro, ¿por qué no buscan que los niños y niñas, mañana hombres y mujeres, crezcan de la mano de espacios audiovisuales que contribuyan a su buen desarrollo y los forme? Por los adultos del mañana yo les digo hoy: necesitamos que crean en nuestros niños y niñas, Colombia está lista para competir con canales cuya razón de ser sea el bienestar de nuestra infancia. Que sean guía y faro también para los adultos que acompañan su formación. Quiero tomar el control para seguir viendo programas nacionales que me hagan soñar y recordar la maravillosa etapa de mi niñez.
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