Pero más allá de lo que todos conocen, Tolima es otro departamento que tiene un misticismo en sus paisajes, en sus municipios y su gente.
Lugares maravillosos como El Espinal, Mariquita, Melgar, Carmen de Apicalá o Flandes se han convertido en destinos obligados en vacaciones cortas o paseos familiares.
Foto: Luis Alveart – Flickr
La oferta gastronómica, como hablaba anteriormente, se ha convertido en un ícono del país. Tamales y lechona, particularmente, tan apetecidos y que, en lugares como Ibagué, se encuentran en combinaciones que asombran. (Ejemplo de esto es lo que llaman “Tamal con capúl”). Asimismo su música, como la guabina y el bambuco, el pasillo y el rajaleña, el torbellino y el bunde, que son parte de nuestra tradición.
Y, aparte de todo lo dicho, este departamento alberga la llamada Capital Musical de Colombia, Ibagué. ¿Saben por qué se llama así?
¿Qué más nos recomiendan del Tolima?