No sólo en los toques que hacen, sino con sus discos independientes que cuentan las historias de los distintos lugares de nuestro país. De esta manera conocí a Natalie, “Sweet Killa”, y a Cristian, “MC Demencia” de Rolamafia, para saber más sobre lo que se ha estado gestando en el mundo del rap colombiano. https://youtu.be/53uDeJf3uYk
Sweet Killa
Natalie es conocida como Sweet Killa. Con más de 6 años haciendo música, fue parte de un grupo de chicas llamado K11, reconocido en la escena del rap local. Pero ya son 2 años de dedicarse a su proyecto solista, en el que acaba de lanzar su disco “Esquirlas”.
“Estamos en un mundo que es poco cordial con las mujeres. Esa es la lucha que yo plasmo en mis letras. Mujeres guerreras”.
Vivió un tiempo en Estados Unidos, lo que le dio una visión sobre su propuesta y sus letras. Se apoya mucho en la poesía para componer, dejando de lado el freestyle para entregar a su público un contenido más cercano.
“Para hacer rap hay que tener corazón y ganas. Encontrar qué decir y hacerlo de forma sincera”.
MC Demencia
Por su lado, Cristian o “MC Demencia”, como es conocido, pertenece a Rolamafia. Lleva más de 15 años haciendo música, comenzando con la improvisación (freestyle) en su barrio, con amigos que estaban en la misma movida. Algunos de estos otros MCs ya tenía renombre en el rap local, y al escuchar los sonidos de Demencia y Rolamafia, los invitaron a grabar su primer disco en un estudio en Las Cruces. Según ellos, tenían “un estilo noventero y unas letras muy sinceras”.
“Lo difícil es la constancia y tener esa capacidad de sacar producto para gustarle a la gente, sin que todo suene lo mismo. Ganarse los oyentes, los seguidores”.
En estos años de experiencia ha podido ver una evolución musical. Si bien antes era ‘más guerrero’ y ahora se siente un poco más trabajado el producto, extraña el trabajo que involucraba crear una canción como cuando comenzó. El avance de la tecnología ha puesto a personas poco talentosas a venderse más que los que llevan esforzándose por sobresalir. Un punto importante de esta evolución del rap local es que antes “veía que en el rap eran puros ‘manes’. Pero ahora afortunadamente se ven mujeres, hasta grupos de siete chicas haciendo Hip Hop”, dice Demencia.
“Las mujeres son muy guerreras y pueden ser más ‘Makia’ que cualquier man. Le ponen más sabor a la escena”.
Para ellos, uno de los grandes problemas del rap en el país está en que la escena local no tiene tanto apoyo para los artistas emergentes. Hay que apoyar a los artistas locales, a todo ese talento que hay detrás de la palabra Hip Hop.