Foto: Óscar Beltrán – Canal Trece
Argentina estuvo este año como invitado de la Feria Internacional del Libro de Bogotá y su pabellón se destacó principalmente por una gran muestra del deporte que ha vuelto famoso a este país, el fútbol. Aunque los eventos, conversatorios, muestras y conciertos tuvieron una amplia variedad de temáticas relacionadas con la literatura de autores como Cortázar, Borges y Pizarnik, además de un poco de tango con clases de baile, el tema central del lugar fue el deporte, tema que ha sido centro de polémicas.
En el penúltimo día de feria, Alberto Manguel, director de la Biblioteca Nacional de Argentina llegó a Bogotá para su conferencia '¿Leemos por placer, pasatiempo, necesidad?, ¿Por qué? ¿Para qué?' y en medio de una charla sobre la situación actual de la lectura en América Latina, sorprendió con unas disculpas a Colombia por haber convertido el pabellón en una cancha de fútbol.
"Pido disculpas en nombre de todos los argentinos por el vergonzoso escenario de un estadio de fútbol montado en una fiesta del libro; celebramos seguramente esos notables futbolistas Borges, Bioy Casares, Alejandra Pizarnik, Cortázar, desde el Martín Fierro en adelante… pero les pido de nuevo disculpas por ese gesto tan absurdo de populismo" fueron sus palabras textuales según la Revista Semana.
Foto: María Alejandra Villamizar Assaf – Canal Trece
La decisión de que el pabellón luciera de esta manera fue de la Embajada de Argentina en Colombia y del ministro de cultura argentino, Pablo Avelluto, quienes, apelando al lema de la feria 'siente las ideas', quisieron apostarle a las emociones que el fútbol despierta en la gente.
Una vez más la cultura popular genera debate en este escenario literario. Recordamos la feria del 2016 en la que la presencia de un youtuber colapsó las instalaciones con la cantidad de niños y jóvenes que querían conocerlo. El fútbol, esta vez, hizo que el pabellón de Argentina estuviera repleto durante los 16 días de feria, muestra de que este tipo de ganchos ha funcionado para acercar a la gente a la feria del libro, pero que por supuesto nos hace cuestionarnos sobre la necesidad de apelar a lo comercial de las masas para promover la cultura de un país.
Al respecto, el escritor Eduardo Sacheri, quien ha estado presente en todo lo relacionado con el pabellón de Argentina, aseguró que respeta la diversidad de opiniones pero que desde su perspectiva "cualquier ámbito de actividad humana merece eventualmente entrar al campo literario, el tema es si entra con calidad o sin ella. Su legitimidad depende el modo en que entre"
Fuente: Revista Semana