Colombia es sinónimo de café. Lo producimos, lo exportamos, lo promovemos y lo presumimos ante el mundo. Pero aunque el país es una potencia cafetera, una pregunta surge con frecuencia: ¿realmente los colombianos tomamos tanto café como se piensa?
Entre mitos, costumbres y datos curiosos, este artículo revela cuánto café consumimos y desmonta varias creencias populares.
¿Cuánto café consume un colombiano promedio?
Aunque Colombia es el tercer productor mundial de café, el consumo interno no siempre ha sido tan alto como se cree.
En promedio, un colombiano consume entre 2 y 3 tazas de café al día, lo que equivale a alrededor de 2,2 a 2,5 kilos de café al año por persona.
Esto nos ubica por debajo de países como Finlandia, Noruega o Canadá, donde el consumo per cápita supera los 7 kilos por año.
Pero hay una tendencia al alza: cada vez más jóvenes, especialmente en ciudades, han incorporado el café de especialidad como parte de su estilo de vida.
Mitos y verdades sobre el consumo de café en Colombia
Mito 1: “Los colombianos toman café todo el día”
Falso… pero con matices.
En las zonas rurales sí es común el consumo frecuente, especialmente entre campesinos y trabajadores agrícolas.
En las ciudades, en cambio, la mayoría de las personas toma café en la mañana y, en algunos casos, después del almuerzo.
Mito 2: “El tinto colombiano es muy fuerte”
Depende.
El “tinto” tradicional suele ser suave comparado con cafés de origen o de métodos filtrados.
Es más diluido, con azúcar y servido en porciones pequeñas. Lo que sí es fuerte es el aroma, lo que contribuye al mito.
Mito 3: “El café quita el sueño siempre”
No necesariamente.
La sensibilidad a la cafeína cambia según la persona. Hay colombianos que pueden tomar café a las 8:00 p. m. y dormir sin problema, mientras otros sienten sus efectos horas después.
Mito 4: “El mejor café se queda en el exterior”
Cada vez menos cierto.
Aunque históricamente el grano de mayor calidad se exportaba, hoy el país vive una revolución del café de especialidad: tostadores, fincas boutique y cadenas de café han impulsado que los colombianos consuman mejores perfiles y procesossin que salgan del país.
Mito 5: “Tomar mucho café es malo para la salud”
Depende de cuánto es “mucho”.
Un consumo moderado (2 a 3 tazas al día) suele ser beneficioso: mejora la concentración, acelera el metabolismo y tiene antioxidantes.
El exceso, como en cualquier alimento, puede generar ansiedad, insomnio o acidez.
El auge del café de especialidad en las ciudades
En Bogotá, Medellín, Cali y otras ciudades es cada vez más común ver cafeterías con baristas, métodos filtrados y granos de origen.
Los jóvenes son los principales consumidores de este tipo de café, buscando experiencias distintas al tinto tradicional.
Este fenómeno está elevando el consumo anual y fortaleciendo la cultura cafetera local.
¿Qué prefieren los colombianos?
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Tinto tradicional: sigue siendo el más consumido, especialmente en estratos 1, 2 y 3.
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Café instantáneo: todavía es fuerte en muchas regiones.
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Café de especialidad: en crecimiento, especialmente en estratos 4, 5 y 6.
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Capuchinos y bebidas cremosas: los favoritos de jóvenes entre 18 y 30 años.
Conclusión: ¿tomamos mucho o poco café?
Para ser un país cafetero, Colombia consume menos café de lo que se cree, pero las nuevas generaciones están cambiando esa tendencia.
Entre tintos tradicionales, cafés especiales y bebidas modernas, el consumo sigue creciendo, impulsado por una cultura cafetera más consciente y diversa.