¿Qué es lo que hace a Bogotá ser esta ciudad? ¿Son sus edificios o quienes la recorren? ¿O será su clima cuántico, sus trancones perennes o su pan rollito? Es muy difícil saberlo, a menos de que varios grupos de bogotanos se reuniesen a pensar e investigar justamente esto. Y esa es la intención que tiene el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (IDPC) al hacer una invitación abierta a todos sus habitantes a construir colectivamente los tres primeros inventarios de patrimonio cultural de la ciudad.
Esta iniciativa hace parte del programa '7 Entornos Culturales', que lanzó el instituto a finales de 2020. “Un entorno es un espacio de la ciudad donde confluyen diversidad de patrimonios, como el patrimonio inmaterial, mueble e inmueble, por ejemplo, los núcleos fundacionales de la ciudad o el centro histórico, en donde confluyen diversidad de patrimonios: inmaterial o bienes de interés cultural como estatuas. Son los lugares donde confluyen estas manifestaciones”, explica Blanca Gómez Lozano, la coordinadora del proyecto de Inventario.
El proyecto identificó siete espacios densos patrimonialmente en Bogotá (Bosa, Fontibón, Suba, Engativá, Usaquén, Usme y el centro histórico) y su intención es generar un conjunto de acciones para la activación y el reconocimiento de estos territorios.
Sin embargo, ¿quién y cómo se puede definir qué es patrimonio qué no? Para la coordinadora del proyecto, los únicos que pueden identificar elementos patrimoniales son personas de la misma comunidad, por lo cual es fundamental hacer este proceso de forma participativa. Pero esto no quiere decir que cualquier lugar o manifestación pueda ser considerada como patrimonio.
“El proceso de inventario es un proceso de activación. Esto es un concepto que busca entender que el patrimonio no existe per se, sino que implica una decisión política. Esta acción política implica que la comunidad genera un reconocimiento y unos acuerdos para reconocer un elemento material o inmaterial como patrimonio”.
Pero esto no quiere decir que cualquier lugar o manifestación pueda ser considerada como patrimonio. “Hay algunos criterios en la norma, por ejemplo, que el patrimonio debe ser de carácter colectivo o que debe permitir sentirse parte de una comunidad o de un grupo social. El patrimonio debe ser algo que contribuya a crear lazos sociales y redes comunitarias y, en últimas, busca proteger una forma de vivir y habitar la ciudad”, afirma Gómez.
Así, este año se escogieron los primeros tres espacios para hacer el inventario: Suba, Usme y Bosa. “Dijimos: el centro ya tiene mucha identificación y es lo que etá más representado. Empecemos por zonas menos representadas en términos de inventario de patrimonio. El otro año continuaremos con las otras tres y podemos ir a espacios de la ciudad que no estén vinculados a ‘7 Entornos’”.
Esta flexibilidad se debe, en parte, a que el proyecto está en fase piloto, pues en Bogotá no existen inventarios de patrimonio. Entonces, el primer paso del IDPC fue formular una metodología para hacerlo, que esla que se usará en estos tres territorios. “A final de año la ajustamos y en 2022 será la implementación como tal. Lo cual no quiere decir que este año no vayamos a generar inventario, pero es probable que la metodología se ajuste en muchos aspectos”, aclara Gómez.
Precisamente por esto, el IDPC hace una invitación abierta a todas las personas que quieran participar en la construcción de estos inventarios y que tengan la disposición de aprender y asistir a reuniones frecuentes. “Pero lo más importante para nosotros es todo el proceso de reflexión y de formación al que van a tener acceso las personas que participen, porque al tiempo que vamos estar construyendo el inventario, se van a poder formar en procesos de investigación participativa y colaborativa del patrimonio”.
¿Quedaste con ganas de participar? Da clic acá para conocer más sobre el proceso de inscripción, que va hasta el 21 y 28 mayo.
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