Cada 19 de agosto, el mundo conmemora el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2008, en memoria del atentado contra la sede de la ONU en Bagdad en 2003, que dejó 22 muertos, entre ellos Sergio Vieira de Mello, alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos. Desde entonces, esta jornada se ha convertido en un espacio para rendir homenaje a quienes arriesgan sus vidas en contextos de conflicto y desastre, y para reflexionar sobre la importancia de fortalecer una cultura global de solidaridad.
Historia y origen de la asistencia humanitaria
La asistencia humanitaria tiene raíces profundas en la Cruz Roja Internacional del siglo XIX, con Henri Dunant como pionero tras la Batalla de Solferino (1859). A lo largo del tiempo, este principio se expandió y consolidó en convenios internacionales como los Convenios de Ginebra (1949), que establecieron normas para la protección de la población civil en tiempos de guerra. Hoy, el concepto abarca rescate, alimentación, salud, refugio, apoyo psicosocial y protección de derechos humanos, entre otros campos.
Contexto mundial: cifras y realidades
De acuerdo con la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), en 2024 más de 363 millones de personas en el mundo necesitaron algún tipo de asistencia humanitaria, un récord histórico impulsado por conflictos armados, emergencias climáticas y crisis migratorias.
En paralelo, la labor humanitaria no está exenta de riesgos: más de 450 trabajadores humanitarios han perdido la vida en la última década en zonas de conflicto como Siria, Sudán, Gaza, Afganistán y Ucrania. Solo en 2023, 116 murieron y 147 fueron secuestrados, reflejando los peligros crecientes de brindar ayuda en contextos violentos.
Colombia: un país receptor y emisor de asistencia
En el contexto colombiano, la asistencia humanitaria ha sido clave debido a más de seis décadas de conflicto armado interno, desastres naturales como deslizamientos e inundaciones, y la llegada de más de 2,8 millones de migrantes venezolanos en los últimos años.
Colombia cuenta con la presencia de organizaciones internacionales como la Cruz Roja Internacional, ACNUR, OIM y el Programa Mundial de Alimentos, además de entidades nacionales como la Unidad para las Víctimas, la Defensoría del Pueblo y decenas de ONG locales que brindan apoyo en territorios vulnerables.
Tipos de asistencia humanitaria
La asistencia se clasifica en diferentes formas:
- Emergencia inmediata: rescate, refugio, agua y alimentos.
- Salud: atención médica, suministros hospitalarios y apoyo psicosocial.
- Reasentamiento y protección: especialmente en contextos de desplazamiento y migración.
- Reconstrucción: apoyo a largo plazo tras catástrofes o conflictos.
- Asistencia técnica: fortalecimiento institucional y preparación ante emergencias.
Principales organizaciones humanitarias en Colombia y el mundo
A nivel global destacan:
- Cruz Roja Internacional
- Médicos Sin Fronteras (MSF)
- Programa Mundial de Alimentos (PMA)
- ACNUR (Agencia de la ONU para los Refugiados)
- UNICEF
En Colombia, además de las agencias de la ONU y la Cruz Roja Colombiana, se encuentran:
- Pastoral Social
- Fuerzas Armadas de Colombia
- Defensa Civil Colombiana
- Norwegian Refugee Council (NRC)
- World Vision
- Fundación Tierra de Paz, entre otras.
Avances y desafíos en la cultura de asistencia humanitaria
En los últimos años, tanto Colombia como el mundo han avanzado en la digitalización de la asistencia, con el uso de drones, inteligencia artificial y sistemas de monitoreo satelital para llevar ayuda a zonas de difícil acceso. También ha crecido la tendencia de transferencias monetarias directas a familias vulnerables, que permiten mayor autonomía en la satisfacción de necesidades básicas.
Sin embargo, persisten retos como la seguridad de los trabajadores humanitarios, la insuficiencia de recursos frente a la magnitud de las crisis, y la necesidad de fortalecer una cultura ciudadana de asistencia, que vaya más allá de la acción institucional y comprometa a la sociedad civil en procesos solidarios.
El futuro de la asistencia humanitaria
El futuro apunta hacia un modelo más preventivo y resiliente, donde la ayuda no solo llegue en emergencias, sino que prepare a las comunidades para resistir y adaptarse a crisis derivadas del cambio climático, pandemias y migraciones masivas.
Ejemplos actuales incluyen los proyectos de reforestación y adaptación climática en el Caribe colombiano, las redes de mujeres líderes comunitarias en África, y los corredores humanitarios digitales en Ucrania, que permiten coordinar entregas en tiempo real.
Reflexión final
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria no es solo un homenaje, sino un llamado a fortalecer una visión de humanidad compartida. Colombia, como país que ha recibido y brindado ayuda, tiene la oportunidad de ser referente en la construcción de una cultura solidaria que inspire al mundo.
La asistencia humanitaria del futuro no dependerá únicamente de grandes organismos internacionales, sino de una ciudadanía consciente y comprometida, donde todos estamos llamados a «ponernos la camiseta» y ser capaces de extender la mano a quienes más lo necesitan.