Bibiana Carvajal hizo fila durante dos días para ver al papa francisco en Medellín. Mientras llegaba el Papa, conoció la solidaridad de los vecinos, aguantó un par de aguaceros y se preparó para buscar la mejor ubicación en el aeropuerto Olaya Herrera, donde Francisco celebró, el 9 de septiembre de 2017, la tercera misa de su visita a Colombia.
La rutina de Bibiana cambió por esos días, como lo hizo la de Medellín: el comercio informal saturó el centro de la ciudad con imágenes de “pachito”, su visita era tema obligado de conversación entre los medellinenses (católicos y de otras religiones) y los medios de comunicación se concentraron en las historias de la máxima autoridad de la iglesia católica. Este documental es un retrato de la Medellín que se trasnochó, se mojó y no paró de hablar hasta que por fin tuvo de frente al Papa Francisco.
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